Por: Andreu Serrano
Cuando haces fotografia de retrato no solo se trata de hacer fotos de la cara de una persona y ya, es mucho más complejo que eso, este tipo de fotografía tiene como intención mostrar la personalidad de la persona o mostrar con el retrato un mensaje en específico, puede ser un sentimiento, una actitud, un sentimiento, etc.
Para lograr esto primero que nada necesitas saber cómo se compone un retrato, los tipos de composición que existen y que reglas de composición se utilizan, que justamente a esto se va a dedicar este artículo.
Es importante ir más allá de los simples retratos, aprender a generar retratos atractivos, interesantes y llamativos requieren de una buena técnica tanto compositiva como fotográfica, perder el miedo a acercarse y mucha práctica.
No dejes mucho espacio libre alrededor del modelo.
Consideramos espacio libre a todo ese espacio que se encuentra en la parte superior y los costados de la cabeza del modelo. Es crucial conseguir la distancia perfecta entre la cabeza del modelo y este espacio libre, ya que de no lograrlo puedes terminar con una fotografía con muchísimo espacio de sobra que distrae y le resta importancia al modelo, justo por eso los retratistas siempre dicen “acércate lo más que puedas”. Toma en cuenta que si dejas mucho espacio este mismo hará que se pierda la atención y competirá con el modelo y si cierras demasiado la toma puedes dar la sensación de que la fotografía está aplastada, e incluso puede llegar a incomodar.
Una sugerencia para lograr el equilibrio entre este espacio libre y el sujeto es irte acercando al sujeto hasta que logres que ese espacio libre ya no llame la atención y se vuelva parte natural del fondo. Si te gusta hacer las tomas más abiertas para después ajustar el encuadre en el post proceso, entonces te recomiendo también dejar espacios a los lados del modelo para que te permita re encuadrar y recomponer la foto.
Fotografía de: Darlene Hildebrandt
Pon mucha atención en la posición de los ojos.
Los ojos juegan un papel importantísimo en el retrato, son el foco de atención principal, por lo cual requieres darle esa importancia. Es fundamental colocar los ojos sobre el tercio superior para darle al retrato una composición más equilibrada y natural. Aunque muchos pueden decir que es válido experimentar y romper cualquier regla (lo cual estoy de acuerdo), los profesionales expertos en este tipo de fotografías concuerdan que siempre debemos seguir la regla de los tercios y colocar dentro del encuadre los ojos en alguno de los tercios o lo más cerca posible, de no hacerlo puedes arriesgarte a darle un aspecto confuso, desequilibrado y antinatural a tu retrato.
Antes de lanzarte a romper esta regla te recomiendo seguirla y analizar bien los resultados para que puedas determinar en qué momento puedes romperla para darle mayor impacto a tu retrato.
Fotografía de: Yury Smelov
Usa los colores como elemento de composición.
Al menos que hagas una fotografía en blanco y negro, los colores son parte de tu composición, estos pueden ser usados para resaltar zonas importantes (un rojo intenso en los labios), darle contraste y volumen al rostro del sujeto, e incluso los colores pueden ser usados para aislar completamente al sujeto de su entorno.
Con los ejemplos que te estoy dando en este artículo pon mucha atención a lo colores para que puedas comprender un poco mejor este punto.
Fotografía de: Alexander Mihailov
Los Tipos de encuadres:
Encuadres rellenados con el mismo sujeto.
Piérdele el miedo a acercarte y hacer fotografías muy cerradas, este tipo de encuadres eliminan todos esos elementos innecesarios de la fotografía. A estos encuadres también se le conocen como primeros planos extremos ya que el enfoque del retrato está en el rostro.
En lugar de incluir otros elementos que rellenen los espacios vacíos del cuadro, intenta rellenar tu encuadre solo con elementos de tu propio sujeto, es decir, rostro (nariz, orejas, cejas, labios, etc.), frente, barbilla y cabello.
Este tipo de encuadre nos apoya a mostrar y reforzar expresiones, lo que nos transmite con mayor fuerza sentimientos y emociones. Incluso es válido hacer cortes de la frente, y zonas cercanas a las orejas para cerrar aún más la toma. Recuerda que siempre se recomienda no mutilar elementos importante del rostro como las orejas y la barbilla ya que esto puede dar un aspecto poco natural y harás que inconscientemente el cerebro de los espectadores intente completar la zona que cortas y eso genera distracción, sin embargo, esto puede funcionar en determinadas circunstancias, así que puedes experimentar.
Fotografía de: Arsenii Gerasymenko
Aquí hacemos normalmente el corte a la altura del pecho. En este caso es importante tomar en cuenta lo que ya había comentado acerca del equilibrio entre la cabeza del sujeto y el espacio libre. En este encuadre rellenamos el espacio de arriba con la cabeza y rostro completo del sujeto y agregamos los hombros para completar el cuadro.
Aquí también es importante colocar los ojos en el tercio superior y se recomienda desenfocar el fondo que pueda salir.
Fotografía de: Victoria Bee
Encuadres de medio cuerpo.
Aquí hacemos el corte arriba de la cintura, aquí ya jugamos con el fondo, es importante darle un equilibro entre la cantidad de fondo y la cantidad que representa el sujeto en el fondo.
Te recomiendo buscar un fondo atractivo, uniforme y limpio ya que, aun que lo des enfoques si tienes por ejemplo un bote de basura de color rojo en el fondo, el color rojo saltara a la vista y distraerá al espectador.
Aquí ya es importante que dirijas tanto la mirada del modelo como sus manos, sus manos ya juegan un papel importante en el retrato por lo que será importante que las coloques donde refuercen la intención de tu retrato.
Fotografía de: Luca Foscili
Encuadre de plano completo:
Estos encuadres no son tan comunes a menos que quieras capturar el ambiente en el que se encuentra tu sujeto o bien te interesa que se vea el vestuario completo del modelo.
En estos casos ya podrás echar mano de elementos de composición como: el espacio negativo, las líneas, los marcos, los puntos de fuga, etc., y usarás también la perspectiva y los ángulos para darle un buen ritmo visual a la imagen.
Fotografía de: Katya Antonova
Aunque estas recomendaciones pueden parecer simples es sorprendente la frecuencia con la que muchos fotógrafos las pasan por alto, espero que te sirvan para algo y si tienes algunas recomendaciones referentes a la composición de los retratos por favor compártelas en los comentarios.
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